La legalización de la pena de muerte ¿Fin del crimen?, u ¿Homicidio injusto?

Desde hace mucho este tema ha sido el centro de muchos debates y siempre se ven los puntos a favor y en contra del mismo, hablar acerca de un tema que por un lado parece traer beneficios pero que igual es a costa de la VIDA de alguien, es simplemente, intrigante. Por eso hoy, mediante este articulo, quiero reunir cuales son esos argumentos a favor y en contra sobre la legalización de la pena de muerte.

La pregunta fundamental o la que siempre vemos a la hora de debatir este tema es si el Estado debería tener el poder de quitar intencionalmente la vida de un ser humano como castigo por delitos graves.

Uno de los argumentos a favor de la pena de muerte es su supuesto efecto sobre la comisión de crímenes graves, de ahí el titulo; la pregunta es ¿realmente tendría mayor impacto en la reducción del crimen? Se dice que la existencia de esta sanción, un castigo que es realmente extremo, podría desanimar por así decirlo o como más común decimos, achicopalar a los delincuentes ya que les generaría un temor por consecuencias si se les atrapara. ¿Qué tan efectivo será? Mientras investigaba, encontré que múltiples estudios han dado distintos resultados sobre este asunto.

Quienes defienden la pena argumentan que es una forma de justicia apropiada y que es un equilibrio (o que es proporcional) a esos casos de crímenes que son tan atroces y violentos. Y es que, como es de imaginarse, para muchos, la idea de que alguien genere un dolor inmenso a otros merece un castigo igual. Sienten que la vida de la persona condenada es un precio justo a pagar por la vida que se ha arrebatado a la víctima.

Yéndonos a los puntos en contra de su legalización, encontramos uno con los que concuerdo, y es el riesgo de ejecutar a personas inocentes. Pues, para nadie es un secreto que a lo largo de la historia ha habido casos en los que personas condenadas a muerte han sido exoneradas debido a nuevas pruebas de ADN, videos, otros testigos e incluso por otras víctimas que permiten desestimar la culpabilidad del supuesto agresor. Y claro en caso de pena de muerte ¿Qué irreversibilidad existe? Ninguna. Por eso, su legalización plantea serias preocupaciones éticas y morales, especialmente porque contamos con un sistema judicial que muchas veces se equivoca, que deja pasar pruebas y que inculpa a quienes no se lo merecen.

Otros opinan que en vez de la pena de muerte, todos merecen la famosa “segunda oportunidad”, dicen que deberíamos centrarnos en la rehabilitación y la oportunidad de redención de los delincuentes. Lo difícil de esta opinión es que cuando incluyen a aquellos que han cometido crímenes atroces pues puede ser más difícil aceptar que tienen el potencial de cambiar y contribuir de manera positiva a la sociedad.

Creo que al final, la situación es clara, el sistema judicial nos anima a eso a contar con una justicia restaurativa, sin embargo la pena de muerte contradice los principios de esa justicia, pone en riesgo la vida de muchos por el mal manejo de pruebas, niega cualquier oportunidad de enmienda e incluso puede hacer que muchos criminales se esfuercen el triple por no ser encontrados, y que además se vuelvan expertos en incriminar.