Montana, la ambición que lo llevó a la cima... y a la muerte
- Andrés Sebastián Ahumada García
- 2 oct 2024
- 9 Min. de lectura

Montana, la ambición que lo llevó a la cima... y a la muerte. En este artículo, nos
adentraremos en el fascinante y oscuro mundo de Scarface (1983), una de las películas
más icónicas del cine, que narra la vertiginosa ascensión y caída de Tony Montana. A
través de su historia, reflexiono sobre el impacto devastador de la ambición desmedida
por el poder y el dinero. En la figura de Montana, encontramos a un hombre que lo
arriesga todo para llegar a la cima, solo para descubrir que el precio de su ambición es
más alto de lo que jamás imaginó. Analizo cómo esta búsqueda implacable de éxito
termina llevándolo a la destrucción, invitando a una profunda reflexión sobre los límites
y peligros de la codicia en nuestras propias vidas.
La historia nos lleva a 1980, cronológicamente cerca al año de su estreno, Fidel Castro
(Ex presidente de Cuba), envío cubanos a los estados unidos para que vieran a sus
familiares, y aparte, envío a más de 25.000 criminales, entre ellos, el protagonista de
nuestro artículo, Tony Montana, o también conocido como Antonio Montana.
La policía entrevista a Tony para saber si es un criminal, debido a los tatuajes y su tan
icónica cicatriz en la cara (Parte clave de su Alias), deciden que, si es un criminal y lo
envían a una especie de prisión, con el Coprotagonista y su mejor amigo, Many.
En esta especie de prisión duran un tiempo hasta que unos contactos de Many les
encargan la misión de acabar con un alto mando, un aliado y parte clave del gobierno de
Fidel Castro, quien convenientemente estaba en la misma cárcel. El grupo de Tony idea
un plan y logran acabar con el tipo, consiguiendo su libertad.
Tony y Many por fin fueron libres, pero no cómo creían, ya que, empezaron trabajando
en un puesto de comida rápida, algo que molestaba mucho a Tony, un tipo con grandes
aspiraciones.
Luego de esto, Many volvió a utilizar a sus contactos para conseguir algo “Mejor”, por así
decirlo, sus contactos le dieron trabajo con “Omar Suarez”, una pieza clave en el éxito y
proceso de Tony, aunque no de buena manera. Omar era un hombre que trabajaba para
un líder del Narcotráfico, quien les da la misión de recoger una mercancía con unos
colombianos.
El día del intercambio llegan al punto de reunión, mientras Many y un compañero suyo
esperan afuera, Tony y su amigo entran a negociar y a hacer el intercambio. Todo parecía
ir bien, pero resulto ser una trampa para robarse la mercancía y el dinero.
A pesar de los golpes y amenazas, Tony no dice dónde está el dinero, cómo consecuencia,
termina en una violenta y sangrienta muerte para el amigo de Tony, un destino que
también hubiera tenido Tony, si su amigo Many no lo hubiera llegado a salvar.
Todo termina en una persecución de Tony y el colombiano que los traiciono, acabando
con una violenta muerte para el Colombíano, dándonos a conocer una de las famosas
frases de Tony “Soy Tony Montana... ¡Si Te Metes Conmigo, Te Metes Con El Mejor!”
Dándonos a conocer su personalidad Egocéntrica y Narcisista.
Tras el violento enfrentamiento, Tony y Many se ganan el respeto y la confianza de Omar
Suárez, quien les ofrece más trabajos dentro del negocio del narcotráfico. Sin embargo,
Tony no está satisfecho con simplemente ser un peón. Su ambición lo impulsa a mirar
más alto y tomar riesgos mayores. Esta actitud lo lleva a un encuentro con Frank López,
un poderoso narcotraficante de Miami, que será clave en su ascenso dentro del mundo
del crimen.
Frank le ofrece a Tony una oportunidad para prosperar y hacer fortuna en el tráfico de
drogas, proporcionándole el acceso y los recursos que tanto ansiaba. A pesar de la
advertencia de Frank sobre no dejar que la ambición lo consuma, Tony comienza a trazar
su propio camino. Su éxito en los negocios lo coloca en una posición de poder cada vez
mayor, lo que provoca tensiones con su antiguo aliado Omar, y despierta las sospechas
de Frank.
El carácter impulsivo y arrogante de Tony, sumado a su implacable búsqueda de poder,
lo lleva a desafiar la autoridad de aquellos que alguna vez estuvieron por encima de él.
Tony no solo busca dinero, sino también respeto y control total. Es aquí donde conoce a
Elvira Hancock, la novia de Frank, de quien se obsesiona. Su deseo por ella no es solo romántico, sino también simbólico de su hambre por poseer todo lo que alguna vez
perteneció a sus superiores.
Poco a poco, Tony empieza a conspirar para tomar el lugar de Frank. Su ascenso
meteórico en el negocio del narcotráfico culmina con la eliminación de Omar y la traición
a Frank. En una escena icónica, Tony asesina a Frank, tomando su lugar como el nuevo
jefe del crimen en Miami. Ahora con Elvira a su lado y un imperio criminal bajo su
control, parece que Tony ha alcanzado la cima de su ambición.
Sin embargo, esta cima es solo el comienzo de su caída. Con Tony Montana en la cúspide
de su imperio criminal, el poder y la riqueza que ha acumulado parecen imponentes,
pero su vida empieza a desmoronarse a causa de su propio ego y las tensiones internas.
La paranoia y la desconfianza empiezan a consumirlo, exacerbadas por el consumo de
drogas y el constante temor a ser traicionado.
La relación con Elvira se deteriora, ya que ella se siente cada vez más atrapada en el
mundo despiadado y violento que Tony ha creado. Su deseo de riqueza y poder no solo
lo aleja de quienes alguna vez fueron cercanos a él, sino que también lo enfrenta a
enemigos implacables que buscan vengarse de las traiciones y abusos cometidos por su
imperio.
La situación se vuelve crítica cuando Sosa, un influyente narcotraficante boliviano, se
convierte en un rival peligroso. Sosa se siente amenazado por el crecimiento desmesurado
de Tony y decide eliminarlo para asegurar su propio dominio. La tensión entre ellos llega
a su clímax cuando Tony, impulsado por su ego y por una necesidad de demostrar su
superioridad, decide desafiar a Sosa abiertamente.
La traición y la violencia culminan en un ataque brutal a la mansión de Tony, donde
enfrenta a un ejército de sicarios en una lucha desesperada por su vida. En una serie de
eventos cada vez más caóticos y sanguinarios, Tony intenta defenderse y proteger lo que
ha construido, pero la inevitabilidad de su caída es clara. Su paranoia lo lleva a desconfiar
incluso de aquellos en quienes debería confiar, aumentando su aislamiento y
desesperación.
La película llega a su trágico desenlace con Tony Montana enfrentando su destino en un
tiroteo final, rodeado de enemigos y enfrentando la realidad de sus decisiones. En un acto
de resistencia y desafío, Tony se enfrenta a sus atacantes con una furia desesperada,
recordándonos su famosa línea: “¡Soy Tony Montana... ¡Si te metes conmigo, te metes
con el mejor!”
La última escena, en la que Tony cae abatido en su lujosa mansión, simboliza la
destrucción de su imperio y la realización final de que su ambición desmedida, su ego y
sus decisiones lo llevaron a una muerte violenta y solitaria. La historia de Tony Montana
es una reflexión cruda sobre los peligros de la ambición sin límites, el precio de la avaricia
y las trágicas consecuencias de vivir una vida gobernada por el poder y el deseo.
En Scarface (1983), el viaje de Tony Montana desde la pobreza hasta el poder supremo
ilustra un tema fundamental: el impacto destructivo de la ambición desmedida, no solo
en uno mismo sino también en las personas cercanas. La película muestra cómo la
búsqueda insaciable de poder y riqueza puede desmoronar no solo el mundo personal de
alguien, sino también arrastrar a amigos y seres queridos en su caída.
Tony Montana, al alcanzar la cúspide de su imperio criminal, no solo se ve atrapado en
una red de traiciones y violencia, sino que también arrastra a sus amigos y familiares en
su tormenta de destrucción. El caso de Manny Ribera, su mejor amigo, es un trágico
ejemplo de cómo la ambición desenfrenada puede destruir relaciones cercanas. Manny,
quien inicialmente apoya a Tony y comparte sus sueños de grandeza, se convierte en una
víctima de la creciente paranoia y celos de Tony. La traición se materializa cuando
Manny comienza una relación con Gina Montana, la hermana de Tony. La posesividad
de Tony sobre Gina, alimentada por su ego y su incapacidad para manejar el poder, lo
lleva a un acto de violencia extrema: asesina a Manny en un acceso de furia, demostrando
hasta dónde puede llegar su ambición desmedida.
La relación de Tony con Gina es otro trágico reflejo de cómo su obsesión con el poder y
el control arrastra a sus seres queridos a su caída. Gina, atrapada entre su amor por Manny
y el deseo de proteger a su hermano, se convierte en una víctima más de la voracidad de
Tony. La culminación de la historia, con la muerte de Gina a manos de Tony durante
un ataque en su mansión, enfatiza la destrucción personal y emocional que puede
acompañar a la búsqueda insaciable de poder.
Estos eventos revelan un mensaje crucial sobre los peligros del poder, la riqueza y la fama:
pueden corroer no solo a quien los persigue, sino también a aquellos que se encuentran
en su órbita. La ambición de Tony Montana no solo lo lleva a su propia destrucción, sino
que también arrastra a amigos y familiares a un destino trágico, ilustrando cómo el deseo
de controlar y poseer puede llevar a la ruina de todos los involucrados.
La historia de Tony Montana en Scarface es más que una crónica de ascenso y caída en
el mundo del crimen; es una poderosa lección sobre los peligros de dejarse consumir por
la ambición. Tony no solo pierde todo lo que construyó, sino que también arrastra a sus
amigos y seres queridos hacia un destino trágico. A través de su historia, somos testigos
de cómo el poder, la riqueza y la fama pueden destruir nuestras vidas y las de aquellos a
quienes más amamos.
En nuestras propias vidas, es fácil dejarse llevar por la sed de éxito y el deseo de
reconocimiento. Queremos alcanzar nuestras metas y disfrutar de los frutos de nuestro
trabajo, lo cual es natural y válido. Sin embargo, es crucial recordar que la ambición sin
límites puede nublar nuestro juicio y alejarnos de lo que realmente importa. El deseo de
más puede llevarnos a tomar decisiones que afectan no solo nuestro futuro, sino también
el de las personas que están a nuestro lado.
Reflexionemos sobre el precio que estamos dispuestos a pagar por nuestros sueños. La
historia de Tony nos recuerda que el verdadero éxito no se mide solo en términos de
poder y riqueza, sino también en cómo tratamos a los que amamos y en la integridad con
la que vivimos. No permitamos que la búsqueda de la grandeza nos desvíe de los valores
fundamentales y de la importancia de mantener relaciones saludables y auténticas.
En última instancia, la verdadera riqueza se encuentra en el equilibrio entre nuestras
aspiraciones y el cuidado de nuestras relaciones más cercanas. No dejemos que el ego y
la ambición desmedida nos desvíen del camino de la empatía y la conexión genuina con
quienes nos rodean. En la búsqueda de nuestros sueños, que nunca olvidemos lo que
realmente importa: vivir con propósito, integridad y amor.
Para ya terminar, me gustaría mencionar algunas de mis frases favoritas de la película:
1. “Tú se Feliz, yo quiero lo que me merezco, el mundo chico y lo que hay en el”
(Tony)
2. “No subestimes jamás la ambición del otro” (Frank)
3. “En este país, hay que ganar dinero primero, cuando tiene dinero, tienes el poder.
Eso hará tu destino” (Tony)
4. “Cuando te conocí, te dije, que los tipos que duran en este ambiente, son los que
juegan derecho, en silencio, tranquilos, y los que quieren tener todo, esos no
duran” (Frank)
5. “Yo nunca traicione a nadie en mi vida que no se lo hubiera merecido” (Tony)
6. “Todo lo que tengo en este mundo es mi palabra, y esta no la rompo por nadie”
(Tony)
7. “Hay que expandirse, abarcar toda la operación. Hay que crear nuestra marca y
hacerla crecer.” “Pensar en grande” (Tony)
8. “Yo siempre te fui leal, yo siempre hice lo que pude por ti y jamás te di la espalda,
nunca” (Tony)
9. “Pero tú, un hombre sin palabra, una cucaracha” (Tony)
10. “No eres un negociante Many, te gustan más las mujeres que el dinero amigo, y
ese es tu problema” (Tony)
11. “No tienen el valor para estar donde deben estar, solo saben esconderse, como
mentir, yo no tengo ese problema” (Tony)
12. “Yo siempre digo la verdad, aun cuando mienta” (Tony)
13. “¡¿Quién crees que soy?! Tu maldito sirviente ¡¿Quieres una guerra?! Porque si
quieres una guerra, entonces vamos a la guerra” (Tony)
14. “¡¿Crees que puedes acabar conmigo?! Necesitas un maldito ejército para
acabarme” (Tony)
15. “¡¿Con quien creen que se metieron?! Soy Tony Montana, si se meten conmigo,
se meten con el mejor” (Tony)
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